Ajuste en los gastos: el único camino posible

La semana pasada, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, presentaba las nuevas medidas de ajuste presupuestario con la finalidad de reducir el déficit que sufre el gobierno de la Generalitat como consecuencia de la pésima gestión económica y financiera realizada por los gobiernos del tripartito y por el déficit fiscal que afecta a nuestro país. Las medidas presentadas por el president no son nada agradables de anunciar ni de ejecutarlas para ningún político. Aunque, por desgracia, son necesarias. No hay otra alternativa.

En los próximos meses conoceremos otras medidas en una línea similar que acordarán otras administraciones del país y de el Estado con el mismo objetivo: reducir el gasto para no poner en peligro el estado del bienestar.

También en Sitges, nos hemos visto obligados a efectuar ajustes y contención del gasto en nuestro Ayuntamiento. Lo hicimos nada más acceder al gobierno municipal al encontrarnos con unas finanzas en estado extremadamente crítico. Y tendremos que hacerlo en el presupuesto municipal del 2012, elaborado de acuerdo con nuestros compromisos electorales de austeridad y contención del gasto.

Reducir el déficit de 67 millones de euros que sufren las finanzas municipales es uno de los principales retos y problemas que tiene el gobierno de La Nova Majoria. La labor que en este sentido está dirigiendo Jordi Mas es de auténtica ingeniería financiera y se basa en una progresiva reducción del déficit sin que esto afecte a la prestación de servicios esenciales ni al mantenimiento de la competitividad.

Para afrontar este déficit, el gobierno municipal está reduciendo el gasto en diferentes capítulos. Somos conscientes de que esto implica sacrificios. Este es el mensaje que hemos trasladado a los representantes de los trabajadores municipales para explicarles el ahorro de 1,9 millones de euros previsto en el capítulo 1 del presupuesto municipal, es decir, el que corresponde al personal del Ayuntamiento. De momento, el sueldo de los cargos electos y directivos y la supresión de cargos de confianza ha permitido un ahorro de 400.000 euros anuales.

La semana pasada, anunciamos el cierre del Centre Obert El Rusc. La actual situación de déficit hacía insostenible económicamente el mantenimiento de un servicio con un índice de uso tan bajo como este. Esta pasada semana también se ha comentado en reuniones sectoriales la necesaria reducción del gasto en el capítulo de fiestas, como ya se ha visto afectado el de subvenciones municipales. Entre todos, con imaginación y sin perder la ilusión, tendremos que ser suficientemente hábiles y responsables para diseñar unas fiestas que mantengan su esencia y proyección cultural, aunque con unos presupuestos inferiores a los de los ejercicios anteriores. Y creo que esto es posible, porque confío en la responsabilidad y cariño por nuestras fiestas y tradiciones por parte de los sitgetanos que les dedicamos tantas horas.

El president Mas manifestó el pasado sábado en Sitges, cuando asistió a las jornadas de trabajo sobre el Pla de Salut 2011-15, que nada volverá a ser como antes. Y no le falta razón. Probablemente, el crecimiento que hemos tenido en estos años ha estado por encima de nuestras posibilidades. Y ahora no tenemos más remedio que reconducir la situación. Si no lo hicieramos, además de actuar irresponsablemente, no podríamos garantizar el estado de bienestar y una sociedad equilibrada. Y este es nuestro compromiso.

Los museos que quieren los sitgetanos

El pasado 27 de octubre, el Ayuntamiento de Sitges y la Diputació de Barcelona constituyeron el nuevo Consorci del Patrimoni de Sitges. Se trata, más allá del trámite administrativo que implica este acuerdo, una noticia de notable transcendencia política, ya que confirma la reorientación de las obras de reforma de los museos Cau Ferrat y Maricel según los criterios defendidos por el gobierno municipal de La Nova Majoria, y compartidos por los órganos de gobierno de la Diputació.

Uno de los puntos del acuerdo de gobierno de La Nova Majoria, firmado el pasado 3 de junio tras las elecciones municipales, fue la protección del patrimonio arquitectónico, que tradicionalmente ha hecho de nuestra villa un singular y admirado lugar. El proyecto de reforma de los museos presentado por los anteriores gobiernos, municipal y provincial, vulneraba este criterio, en tanto que afectaba negativamente la conservación del patrimonio de los edificios objeto de la actuación.

Una de las primera instrucciones que dí, nada más salir elegido como alcalde, fue parar la reforma de aquellos puntos que no cumplían con estos criterios, en consonancia con la línea argumentada por la plataforma ciudadana SOS Sitges, a la que quiero agradecer la actitud de conciencia para preservar nuestro patrimonio que han demostrado durante estos años.

En este sentido, el nuevo Consorci del Patrimoni surgido del acuerdo entre Ayuntamiento y Diputació ya está gestionando las obras de la reforma de los museos reconduciendo tres puntos de importancia absoluta: la supresión de la fachada de vidrio y de la rampa exterior con vistas al mar que rompían con el conjunto arquitectónico original, la eliminación de las tarimas del Cau Ferrat realizadas para esconder el cableado y que han hecho que se perdiera la dimensión y la perspectiva del interior, y la modificación de la fachada de Can Rocamora (Can Xicarrons) para adaptarla al diseño original.

Ahora, con la constitución del nuevo Consorci, llega la hora de las instituciones. Es el momento de que las obras de reforma de los museos –absolutamente necesarias, a causa del grave deterioro de los edificios– garaticen la ejecución de un proyecto ambicioso en los términos y plenamente respetuoso con nuestro patrimonio arquitectónico. Creo que no me equivoco si afirmo que la reorientación del proyecto coincide con el sentimiento generalizado de los sitgetanos y sitgetanas, que mayoritariamente nunca han visto con buenos ojos las intenciones del anterior proyecto.

Por este motivo, las dos instituciones que constituímos el Consorci hemos acordado nombrar a Vinyet Panyella como directora-gerente del nuevo organismo, cargo del que tomará posesión en los próximos días. El perfil de Vinyet es el ideal para este puesto de responsabilidad y más en este momento en que hay que gestionar con mucho cuidado y habilidad la reconducción de las obras de reforma: una sólida experiencia en la gestión cultural, una brillante trayectoria intelectual y un profundo amor por Sitges y su patrimonio en toda su inmensidad. Que Vinyet haya aceptado este encargo es una garantía para el Consorci y la gestión que alcanza el mismo: los museos, el Palau Maricel y la Fundació Stämpfli – Art Contemporani.

Ahorro en recursos humanos: medidas necesarias

La semana pasada, el gobierno municipal anunció un paquetes de nuevas medidas de ahorro con el objetivo de contribuir a redireccionar la crítica situación económica del Ayuntamiento como consecuencia de la política suicida que se llevó a término los últimos años. Este nuevo paquete de medidas está orientado a contener el gasto de recursos humanos del Ayuntamiento, a los que no puede hacer frente en la actual situación.

Una de las primeras medidas que llevó a cabo el gobierno de la Nova Majoria fue reducir un 12% los sueldos de los regidores y del alcalde y rebajar drásticamente el número de cargos de confianza y directivos, que estaba totalmente sobredimensionado. Esta decisión inicial supuso un ahorro de 400.000 euros anuales. Paralelamente, la estructura orgánica de la corporación también fue rediseñada radicalmente y se redujeron las siete áreas anteriores a tres, hecho que supuso un ahorro en los costes.


Con todo, para reorientar la economía municipal se necesitan otras acciones de contención y reducción de gastos. Y el principal gasto municipal es el capítulo de personal. Por este motivo, de cara al presupuesto municipal del 2012, hemos elaborado un plan que permitirá al Ayuntamiento un ahorro de 1,9 millones de euros anuales, una medida absolutamente necesaria e imprescindible en la situación en que nos encontramos.

Para aplicar estas medidas tenemos dos opciones: despedir a trabajadores o distribuir la reducción de costes entre el conjunto de la plantilla. Hemos preferido la segunda opción y así se lo hemos comunicado a los sindicatos, ya que entendemos que es más solidaria, justa y equilibrada. El paquete preve anular la productividad y el plan de pensiones acordado por el gobierno anterior, reducir las horas extraordinarias de la Policía Local y el plus de la Brigada Municipal, reducir los contratos temporales, así como los complementos de puesto de trabajo. A estas decisiones se suman las ya anunciadas –y aplicadas– al principio de la la legislatura de reducir el sueldo de los cargos públicos y directivos.

A nadie le gusta afrontar situaciones como esta. No son populares ni, por descontado, agradables de ponerlas en práctica. Detrás de cada trabajador del Ayuntamiento existe una realidad personal y familiar que también sufre la situación actual. Soy plenamente consciente y por esto quiero agradecer su profesionalidad y solidaridad.

El gobierno municipal ha hecho de la austeridad no solo su bandera, sino también una necesidad. La situación financiera de la corporación es tan extremadamente crítica que requiere esfuerzos y sacrificios acentuados por parte de todo el mundo.

Encuentro con los parados

El Ayuntamiento ha abierto hoy el plazo para la participación en un acto al que quiero darle un relieve significativo: un encuentro con las personas paradas de Sitges, el segmento de la sociedad que más sufre la crisis y las dificultades económicas actuales y sobre el que el conjunto de las administraciones y la sociedad, han de orientar las principales políticas sociales.

La organización de este acto responde a uno de los compromisos que adquirí durante la pasada campaña electoral. Se trata de un acto enmarcado en el programa “Parlem de Treball” a través del cual queremos compartir y definir con las personas que más necesitan las acciones y estrategias que favorecen el trabajo y la formación. La jornada se celebrará en el Centre d’Iniciatives Econòmiques Nivell 10, el 13 de diciembre y los interesados en participar ya pueden tramitar sus solicitudes en Nivell 10.

El paro es uno de los grandes dramas de nuestro país. Así lo detallan los estudios demoscópicos, pero, sobre todo, lo ponen de manifiesto las contundentes cifras, que mes tras mes, evalúan que el drama se acentúa. Nadie se salva. En Sitges, tenemos unos índices por debajo de la media nacional o del resto de la comarca, pero el problema es igualmente importante. El Ayuntamiento difícilmente puede aportar soluciones directas a las personas en paro, pero en cambio si que puede ofrecer respuestas definidas, que pueden contribuir a encontrar salidas viables para los afectados. Cursos de formación, bolsas de trabajo, ayuda a la autocupación, fomento de oportunidades… son algunas de las vías en las que estamos trabajando con todo el coraje que pide una situación como esta. Y la ayuda personal, por descontado, no puede faltar tampoco en este tipo de situaciones. Por este motivo, el acto del día 13 es uno de los que quiero aportar una carga mayor, no solo simbólica, sino también ejecutiva.

La mirada de un siglo de Ángeles Santos. Por otro lado, hoy lunes 7 de noviembre, la célebre artista Ángeles Santos Torroella cumple 100 años. Nacida en Portbou –patria de la tramuntana, y que ha marcado la genialidad de tantos ampurdaneses– Ángeles vivió en Sitges los años sesenta y setenta, con su marido, el también artista Emili Grau Sala, cuyos restos reposan en el cementerio de Sant Sebastià. Los vínculos de Ángeles y Emili –así como de su hijo Julián Grau Santos, también pintor– con nuestra villa constituyen un ejemplo de la intensa y fructífera relación entre Sitges y el mundo de las artes.

Un Mundo (1929), de Ángeles Santos

Este idilio entre Sitges y el arte, que se remonta más de 150 años atrás de la mano de las paletas de la Escola Luminista, se escenifica con una visita a uno de los principales museos de arte moderno: el Reina Sofía de Madrid. La primera obra que encuentras es, precisamente, Un mundo (1929), de Ángeles Santos, un óleo surrealista de gran formato que recoge sus influencias intelectuales y su sensibilidad artística. A continuación, en el mismo Reina Sofía, te topas con uno de los Jardines de Aranjuez de Santiago Rusiñol. Realmente, esta –puede ser no tan casual– coincidencia de dos pinceles vinculados estrechamente a nuestro pueblo en las paredes del reconocido museo es una de las mejores maneras de presentar a Sitges como cuna de artistas.

Hace tres semanas, la regidora de Cultura, Mireia Rosell, descubría una placa de homenaje al fallecido Manel Ferrer en la fachada de su casa, acompañada de su familia. La confluencia poliédrica de artistas como Manel, que vivieron el día a día de Sitges y lo reflejaron en su obra, y otros pintores como Ángeles Santos o Santiago Rusiñol, que se dejó seducir por la magia que desprende nuestro paisaje, han contribuido a solidificar el patrimonio cultural de nuestra villa y proyectarnos como capital de las artes.