Director General de Turismo, Concejala y primera teniente de alcalde, Presidente del Gremi d’Hostaleria, Presidente del Club de Tast, galardonados y galardonadas, agremiados y agremiadas, muy buenas noches a todos.
La cena de esta noche marca un hito importante en el calendario, la de los 40 años de trayectoria ininterrumpida en nuestro municipio del Gremi d’Hostaleria, decano de los gremios hoteleros de nuestro territorio.
Han sido cuatro décadas en las cuales el Gremi d’Hostaleria ha sabido liderar los sueños de los asociados y en que ha velado para dar respuesta a inquietudes de un sector de importancia estratégica en Sitges. En todo este tiempo, ha seguid un camino compartido con el resto de la sociedad local. Por este motivo, quisiera sentir también como nuestra efeméride, en tanto que la institución que represento sigue y seguirá velando por el sector del turismo en el presente y futuro.
Cuarenta años han puesto de manifiesto la importancia de cualquier colectivo que esté en red. Desde el Gremi habéis contribuido a dar empuje a un sector sometido a los cambios de un mercado bastante competitivo y su necesaria modernización. Lo habéis hecho unidos y en estado de alerta. Es en parte vuestro, pues, el mérito que la marca Sitges se haya mantenido en una posición líder. Y esta noche os quiero dar sinceramente las gracias.
Dos datos demuestran los logros alcanzados como destino en los últimos años. La primera fueron las muy óptimas cifras de ocupación hotelera, casi llena en temporada alta. Esta es la primera gran noticia. La segunda es que, a diferencia de otros lugares, lo hemos hecho apostando por un modelo de calidad. Esto nos ha permitido ahuyentar la amenaza de la turismo fobia, que no se ha llegado a visualizar en Sitges. Pero, en los tiempos que corren, con el descontento de la sociedad por la severa crisis económica y social sufrida, con las limitaciones para muchas personas aún en el acceso al mercado de trabajo o en el mantenimiento de un empleo estable y digno, con la precariedad laboral, con las problemáticas de acceso a una vivienda, con las molestias y presión que pueden generar las actividades (cualquier actividad genera molestias, también la turística) o el amplio calendario de eventos que tenemos en Sitges... Con todo ello, el riesgo de que nazca y se multiplique un brote de cuestionamiento del turismo en Sitges existe todavía.
Y por eso, y para continuar haciendo de Sitges un destino turístico internacional de calidad son fundamentales cuatro cosas:
1) PRIMERA. El compromiso de los gobiernos públicos con el sector turístico, capaz de generar riqueza y puestos de trabajo, incluso en tiempos de crisis. Y este compromiso lo tenéis: el gobierno municipal cree firmemente que el turismo es el motor económico de Sitges y que, como tal, hay que planificar bien y verter todo tipo de recursos. En esta línea, dejar decir que el Presupuesto municipal de turismo ha aumentado en los últimos dos años un 44%, pasando de los casi 350.000€ en 2016 en medio millón de euros que tendrá de presupuesto la Concejalía de Turismo el año próximo. Esto sin contar con el proyecto de reforma de la masía de Can Milà, de 440.000€ más, prevista también para el próximo año como centro de recepción de visitantes y de promoción turística y que nos situará a nivel presupuestario en casi 1 M€.
2) SEGUNDA. El trabajo conjunto y de cooperación entre el Ayuntamiento y el sector privado: la colaboración público privada con objetivos y planes de trabajo consensuados y en la misma dirección. El formato que ha adoptado la colaboración público-privada en el actual mandato es el Consejo Asesor de Turismo. Conjuntamente con la concejala de Promoción Económica, Turismo y Playas, Aurora Carbonell, quisiera resaltar el plan de continuidad que supone esta nueva herramienta. Si en otros momentos nos habíamos reunido bajo el paraguas del Patronato Municipal de Turismo o de la Agencia de Turismo de Sitges, el Consejo Asesor de Turismo representa ahora el nuevo espacio donde el diálogo y la colaboración están plenamente garantizados. Ahora sólo nos falta ganar en agilidad y aumentar en recursos técnicos.
3) TERCERA. La convivencia. Esto ocurre por el control, inspecciones y, en su caso, sanciones de las actividades que se desarrollan de manera molesta o irregular. Así como el mantenimiento de un entorno urbano paisajístico atractivo, de convivencia y de confort. Importantísimo en este ámbito, mejorar en la gestión municipal del mantenimiento del espacio urbano, las playas y la fachada marítima, los parques y jardines, la limpieza y la recogida de residuos y la seguridad, así como en la lucha contra la venta ambulante irregular y de toda actividad ilícita. En este ámbito del control, ayer la Junta de Gobierno Local aprobó la actualización del Plan de usos del Casco Antiguo que, de entre muchas cosas, ha sido muy sensible a las peticiones que se nos ha hecho desde el Gremio para ganar en calidad más que en cantidad y, por tanto, se limitará la oferta de nuevos restaurantes y establecimientos de dispensa de comidas para llevar en el núcleo del casco antiguo, así como se determinarán los nueves ejes comerciales y de ocio. Por otra parte, el próximo lunes, el pleno municipal aprobará el nuevo plan de ordenamiento de las viviendas de uso turístico, limitando con números clausus para barrios la capacidad de absorción que tiene nuestro municipio en cuanto a este tipo de alojamiento.
4) Y CUARTA. La revisión económica y social de la riqueza que genera el turismo en todas las capas de la sociedad. Debemos ser capaces de que el éxito de los resultados turísticos de las últimas temporadas, en términos generales de niveles de empleo, de facturación de cada establecimiento y de recaudación de la tasa turística, devuelvan a la sociedad en forma de mejores para las personas, como la lucha contra la precariedad laboral o como mayores y más justas políticas públicas a través de las aportaciones que significan los impuestos. Esta reversión es, sin duda, una gran oportunidad directa para mejorar las cosas, pero también la mejor argumentación contra toda expresión de rechazo del turismo que alguien pudiera insinuar en Sitges.
En esta Cena del Agremiado 2017 nos comprometemos como Ayuntamiento a continuar trabajando juntos. Hemos dedicado muchos años a hacer promoción turística juntos. Ahora también debemos hacer más gestión turística para lograr sostenibilidad, competitividad, excelencia que dibuja el Plan de Calidad Turística que este año hemos aprobado y consensuado.
La planificación, el control, un buen plan de acciones y un adecuado calendario de eventos, pensado para todos los segmentos turísticos que tratamos en Sitges (el vacacional, cultural, de negocios, gastronómico, deportivo LGTBI...) es fundamental. Pero también lo es que cada uno de vosotros continúe siendo, desde vuestros establecimientos y desde sus profesiones, prescriptores generosos del destino de Sitges.
Quisiera expresar, pues, mi más sincera enhorabuena a todos los establecimientos y profesionales que han sido premiados esta noche. Precisamente estos reconocimientos, desde el Tast de l’Any hasta los premios a la Tradició Familiar, son una buena radiografía de lo que representa este sector para Sitges.
Un sector vital, social, innovador, y fuerte, incluso en momentos de incertidumbre política. Un sector que, como ponía en valor al inicio, ha sabido hacer de la necesidad virtud, trabajando en red y aportando su indispensable contribución al posicionamiento de Sitges como destino turístico internacional y de calidad.
Por muchos años Gremi d’Hostaleria, que el 2018 sea un año de prosperidad y de mucha salud, que tengáis una feliz Navidad. Muchas gracias.
