lunes, 22 de mayo de 2017

Turismo y posicionamiento: los nuevos retos

La semana pasada hicimos la primera reunión del nuevo Consejo de Turismo de Sitges. Se trata de un nuevo órgano impulsado por el Ayuntamiento, y que cuenta con la presencia y participación de todos los agentes públicos y privados con responsabilidades en la gestión y la planificación turística local. Están los representantes de los hoteles, restaurantes y bares; los de los campings y apartamentos turísticos; los de los servicios de playas, o los de los puertos deportivos así como el Consorcio del Patrimonio o el Parque del Garraf, entre muchos otros. El nuevo Consejo tiene una composición plural y poliédrica, porque el turismo hoy en día es transversal y hace falta planificarlo desde diferentes ámbitos, tanto públicos como privados y asociativos.

El Consejo de Turismo tiene como misión planificar la política de promoción turística del municipio y detallar las acciones y la línea que interesa al conjunto del municipio, tanto desde la óptica global como en las acciones puntuales y sectoriales. En este sentido, el Consejo dispondrá de grupos de trabajo de diferentes áreas y entre sus objetivos tiene el realizar un diálogo permanente con la ciudadanía para que hagan llegar sus inquietudes i propuestas.

El triángulo sector público – sector privado – comunidad (es decir, los vecinos del municipio) constituye uno de los fundamentos del nuevo Consejo de Turismo, El trabajo bilateral que ha distinguido las políticas de planificación turística en las últimas décadas ha sido substituida por las nuevas políticas a tres bandas. Y en ese sentido, el nuevo Consejo de Turismo es una ya diseñada desde un buen principio en esta línea para adaptarse a los nuevos retos. Una de las primeras acciones será la audiencia pública de presentación del Pla de Qualitat Turística 2017-2021, que haremos el próximo 5 de junio. En este acto, someteremos a audiencia pública el plan estratégico de turismo, que queremos consensuar entre administraciones, sector privado y ciudadanía.

El turismo es la industria de Sitges. Desde hace más de cincuenta años, el municipio vive del turismo y hace más de veinte lo hace todo el año, gracias a los congresos y convenciones, que permitieron romper la estacionalidad que había imperado décadas atrás. Por este motivo, el Ayuntamiento tiene entre sus prioridades impulsar acciones de promoción, de ordenación y ejecución estructurales para favorecer y dar apoyo a esta actividad económica.

En esta línea, el Ayuntamiento está ejecutando diversas acciones, algunas orientadas propiamente a la actividad turística y otros de las cuales se beneficia el propio turismo. En el primer punto, en los últimos años hemos ejecutado acciones como la moratoria en la concesión de licencias a apartamentos turísticos, minimarkets y otros negocios que no se enmarcan en la línea de imagen que necesita Sitges; las regeneraciones de las playas (tanto la aportación de arena de cada verano como el proyecto estabilizador en el cual estamos trabajando con el Ministerio); el impulso de festivales para dotar de actividad durante todo el año (algunos organizados directamente y con participación municipal, como el flamante de los Jardines de Terramar, el Sitges Next de publicidad, el de Jazz o el de Cine, que este año celebra cincuenta ediciones); o el diseño y ejecución de acciones que directamente tienen una repercusión en la actividad turística (la campaña de promoción Sitges Viu, la Ruta de la sal, el etnoturismo...).

Por su lado, las acciones llevadas a cabo por el Gobierno Municipal y que tienen una incidencia directa en la actividad turística son el proyecto del nuevo Plan de Usos, que terminaremos en los próximos meses; las acciones para reducir el top manta; las acciones culturales de primer nivel –como la celebración de la exposición dedicada a Ramon Casas–, que contribuyen a posicionar Sitges como un referente cultural o el nuevo Plan de Patrimonio Arquitectónico, que tiene como misión proteger los edificios que marcan nuestra singularidad e identidad.

Queda mucho por hacer, pero estamos avanzando en la buena dirección, según nos indican los informes y evaluaciones elaboradas por especialistas, que apuntan que Sitges mantiene su marca de referencia en el conjunto del país. Los datos de ocupación, de organización de eventos y de iniciativas que llegan a Sitges se han multiplicado en los últimos años e ilustran nuestro potencial y la atracción que tenemos en estos momentos. Con todo, Sitges necesita estar continuamente en movimiento, generar nuevas iniciativas y actuar como laboratorio de ideas y propuestas que marcan el turismo del siglo XXI. Y el flamante Consejo de Turismo es una excelente herramienta para hacerlo posible.