Estamos a punto de celebrar una nueva Navidad, signo inequívoco que finaliza un periodo en el que consciente o inconscientemente hacemos balance y nos planteamos la hoja de ruta de lo que tendrá que ser nuestro camino durante el año que estamos a punto de empezar. Y es que Navidad llega cada año y siempre será así. Y con la Navidad también llegan los recuerdos y costumbres a través de nuestras tradiciones.
Con el nombre de Nadal a Sitges, este año celebramos las fiestas con más actividades y propuestas que nunca. Lo haremos combinando tradición y nuevas propuestas, gracias al vigor que demuestran personas, entidades y colectivos. En Navidad más que nunca queremos compartir, vivir y hacer vivir. Y al margen de los momentos íntimos y familiares que cada uno de nosotros tenemos programados, hemos de reservar espacios y ocasiones para disfrutar colectivamente.
Las entidades preparan una vez más sus citas más tradicionales. Prado, Retiro y Agrupació de Balls Populars se disponen a organizar sus “quintos”. Disfrutaremos otra vez de las mágicas filigranas de nuestros pesebristas en la exposición del Palau del Rei Moro, tendremos diversos y variados cantos de villancicos por distintos rincones de Sitges, donde gozaremos de la oportunidad de ir descubriendo paisajes en aquellos rincones que ya forman parte de nuestra memoria navideña y que, año tras año son fieles a la tradición montando su pesebre. Esta Navidad celebraremos dos décadas de otra de las citas lúdicas para los más pequeños, el Parc de Nadal llega ya a su vigésima edición.
Pero antes de que pase todo esto, en Sitges hace días que disfrutamos de la Navidad y esto es posible gracias a nuestro comercio. Los comerciantes son los que muy pronto, a principios de diciembre, nos avisan de que llega un momento especial. Los propietarios de comercios ponen toda la ilusión y esfuerzo en transformar sus establecimientos en un lugar mágico. Este año hemos vuelto a disfrutar de Santa Llúcia, aunque más allá de esta tradicional cita en nuestro calendario navideño, hay que destacar el trabajo que han hecho los colectivos de comerciantes de la calle Jesús y del Cap de la Vila que ha ido creciendo en cada una de las ediciones recientes. Este año sitgetanos y visitantes han disfrutado de las compras en la calle de la mano de los establecimientos del centro del municipio, también en las calles Sant Pau y Major que se han adherido a esta iniciativa. Durante dos días nuestros comerciantes han sacado sus productos a la calle, aunque también hay que recordar que nosotros hemos de entrar. Seguro que la experiencia de compartir una compra en un comercio pequeño resulta gratificante. Y es que todos juntos tenemos una parte de responsabilidad cuando hablamos del mantenimiento del comercio local. A algunos les resultará muy práctico comprar los regalos navideños por Internet, otros preferirán pasar un agitado día en un centro comercial, pero seguro que no hay regalos con más corazón que aquellos que se han ido buscando de tienda en tienda, aquellos que te han permitido conversar un rato con algún dependiente, disfrutar de una experiencia que va más allá de llevarse algún producto a casa.
Esta singularidad, la de vivir la sensación de que algo especial está pasando, es la que en estas fechas hemos de ser capaces de hacer vivir a los niños, sea grande o pequeño lo que esperan de estas fiestas, ellos son quienes las vivirán con mayor autenticidad. Hemos de hacer todo lo posible para que, sea la que sea la circunstancia familiar que les rodea, disfruten de la Navidad. Y Sitges en esto ha demostrado más que nunca su generosidad. A los colectivos que desde hace años se esmeran en la organización de acciones solidarias para garantizar la alegría de los más pequeños, se han sumado diversas entidades sociales, buena parte de ellas de la Taula del Tercer Sector, todas ellas con la misma vocación: reducir los efectos todavía demasiado crudos de una crisis que espero que podamos abandonar con la última campanada del 2013.
Sea cual sea el grado, intensidad o anhelo que tengamos en Navidad, todos, hasta aquellos a los que no les gustan estas fiestas, en algún momento colectivo o individual, nos veremos obligados a hacer un balance y plantearnos de forma particular o compartida un anhelo de futuro.
Desde el Ayuntamiento, también nos proponemos los objetivos compartidos que trazamos con la aprobación de las cuentas municipales del año que pronto estrenaremos. Su aprobación marcará la ruta de un año que tengo la firme convicción que será mejor que el que vamos a dejar. Y lo será porque se ha conseguido buena parte de los esfuerzos que hemos hecho. Y ahora, que hemos recorrido la parte más dura del camino quiero aprovechar la ocasión para agradecer a todos los ciudadanos y ciudadanas. Quiero dar las gracias por el esfuerzo realizado en los momentos más complicados. Y quiero dar las gracias a todos, a los que han entendido que empezar el camino del restablecimiento era un trabajo que teníamos que compartir, a los que no lo han compartido y, especialmente a los que en su condición de representantes políticos han primado el sentido del a responsabilidad y las ganas de construir por encima de cualquier otro objetivo. El 2014 será un año clave para Sitges y para el País, en el que hemos de poder disipar las dudas sobre nuestro futuro, con democracia y libertad.
Deseo, pues, que el próximo año llegue colmado de buenos momentos. Para aquellos que no lo sean continuaremos luchando con esfuerzo y esperanza. Renuevo mi compromiso de trabajar con las más altas dosis de ilusión que, con energía como compañía de viaje, nos traerá seguro un mejor año.
Feliz Navidad y año 2014
