jueves, 31 de octubre de 2013

Presupuestos de consenso: responsabilidad y cohesión

El pasado lunes, el pleno municipal aprobó inicialmente los presupuestos del 2014 con el voto a favor de las tres formaciones que forman parte del gobierno municipal (CiU, SGI y NH) y el PSC. Diecisiete de los veinte regidores de la corporación aprobaron el documento que avala las líneas generales de gobierno, administración y gestión municipal del próximo ejercicio. Los presupuestos del 2014 tendrán un fuerte acento social y recogen las previsiones del gobierno municipal para rebajar la presión fiscal, tal como ya se había anunciado.

El acuerdo entre el gobierno municipal y el PSC para la aprobación de los presupuestos es el resultado de la negociación llevada a cabo en las últimas semanas. El alto sentido de la responsabilidad, así como la voluntad manifiesta de las dos partes para que el Ajuntament de Sitges pueda ejecutar una acción que potencia los gastos sociales más necesarios y que, al mismo tiempo, reduce en la medida de lo posible el conjunto de la política impositiva a los ciudadanos, permitirá ejecutar los presupuestos que Sitges necesita en las circunstancias actuales. Serán unos presupuestos de crisis, que es el contexto en el cual nos encontramos, pero serán una herramienta de gran utilidad para implantar acciones de soporte a las personas que más sufren y, al mismo tiempo, descargar parcialmente el gasto que deben aguantar las clases medias. 

Gracias a este acuerdo, podremos aplicar la reducción del IBI, de la tasa de la basura y del impuesto de plusvalía, así como otras tasas como el billete del autobús urbano. El acuerdo también permitirá un crecimiento de las actuaciones de política social un 6’8% respecto este año y las de seguridad ciudadana un 2’6%.

La política de rigor presupuestario y del gasto que hemos aplicado en los últimos dos años ha permitido que ahora nos podamos plantear reducir parcialmente las tasas e incrementar las políticas sociales. Durante estos dos años, hemos tenido que tomar decisiones desagradables, que han supuesto sacrificios y que han tenido un impacto directo sobre el tejido sociocultural del pueblo, las fiestas locales, determinados servicios públicos y el conjunto de los trabajadores y funcionarios municipales. Han sido decisiones complicadas, pero necesarias para garantizar el correcto desarrollo de la mayoría de servicios, especialmente los sociales, que son los que centran nuestra política. 

Ahora, gracias a esta política de reducción del gasto y del rigor presupuestario, podremos reducir la política impositiva e, incluso, potenciar las líneas de ayuda social. Habrá que continuar actuando de forma estricta en el gasto, con el rigor y sentido de la responsabilidad que nos ha caracterizado, porqué gestionamos dinero público. Pero también es cierto que las decisiones más dolorosas ya no se volverán a repetir.

Quiero subrayar la actitud mostrada por todos los partidos que avalan este acuerdo y, en especial, el PSC, que ha actuado pensando en los intereses generales en vez de los de partido. Y esto cabe resaltarlo como se merece. Sitges saldrá ganando.