Ayer por la noche tuve la oportunidad de reunirme con el equipo y los voluntarios que hacen que sea posible la organización y funcionamiento del Festival y les transmití un mensaje: durante estos diez días la marca Sitges está en vuestras manos. El Festival es la iniciativa de Sitges con mayor proyección estatal e internacional. El coste del impacto que tiene en los medios de comunicación constituye una inversión excepcional, que permite que el nombre de nuestra localidad sea conocido en todo el mundo.
El Festival nació hace 45 años por la iniciativa de un grupo de sitgetanos. Durante todo este tiempo, ha crecido, ha ampliado sus formatos, ha modificado su nombre, se ha adaptado a las nuevas demandas y necesidades y se ha convertido en el primer certamen de género fantástico del mundo. Para Sitges constituye un acontecimiento de primer orden y un motivo de satisfacción y orgullo, que este Festival haya conseguido el nivel y reconocimiento del que disfruta en la actualidad.
Este año, como ya se empezó a aplicar el año pasado, el Festival ha reforzado su acento sitgetano. La doble inauguración que haremos esta noche recoge este espíritu, que, para el Ayuntamiento, constituye una prioridad. El auditorio del Meliá es un equipamiento de primer nivel, gracias a que el Festival ha conseguido una proyección que no hubiese sido posible de otra manera. Pero, el Festival sin Sitges, su entorno y su ambiente tampoco sería lo que es. Por este motivo, el equilibrio de los dos ejes y su buena combinación es la llave para que Sitges – Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, el festival, sea un ejemplo de manifestación cultural de primer nivel. Nos sentimos muy satisfechos.
